A través de diferentes plataformas en Internet se recrean experiencias infantiles de las primeras décadas del 2000, especialmente de los videojuegos online. Internet era un patio de recreo, tan insondable y abrumador desde su invención y nos expuso a simulaciones de diversos contenidos que quedan en nuestra memoria. Esta es una carta de perdón al amigo que traicionó nuestra confianza.